Singapur, una isla en Asia

Si he de seros sincera Singapur no estaba en nuestro itinerario, ha sido uno de esos destinos que paulatinamente se iba cruzando en nuestro viaje. Solo conocíamos su fantástico aeropuerto, pues en diferentes momentos de nuestra ruta ha dado la casualidad de que teníamos como escala el espacio aéreo de esta ciudad. Y ahora no diré que los niños alucinaban en colores, sino que toda la familia sentía el confort que ese aeropuerto transmite desde el mismísimo momento en que tu pie roza su suelo.

–          Mira que pantalla tan graciosa, ¿Podemos tocar esas caritas que salen en la pantalla?.– Noa he Ishi señalaban una pantalla colocada a la salida de los aseos, donde podías plasmar el grado de satisfacción en como habías encontrado el aseo dando a una de las caritas en sus diferentes estados emocionales “smile o no tan smile face”

–          Bueno pero solo una vez, esto no es un juego, representa si te ha gustado como has encontrado el baño o no,  si todos los niños lo tomaran como un juego,  el resultado quedaría alterado, entendéis.- Ángel aupó a Noa que no llegaba bien a la pantalla

Si todas las esperas improvistas y sabidas de nuestro viaje las hubiésemos pasado en un lugar como este os aseguro que esos minutos u horas más tediosas nos habrían pasado volando, incluso queriendo repetir un poquito más. Ishi montaba sus batallitas de caballeros fotografiando momentos para poder hacer una película donde captar los movimientos de los muñequitos, Noa hacia amigos por cada rincón de las zonas de recreo infantil, y nosotros, como padres no teníamos que hacer grandes filigranas para que se mantuviesen entretenidos, siempre encontraban algo que hacer. Cada rincón se convierte en una pequeña ciudad en la que poder disfrutar de un poco de todo. Vaya, que si es por nosotros, le daríamos el premio más perseguido y seguro que  si se les preguntase podrían tener la respuesta al ¿cómo mantener a todo el mundo complacido?, lo cual no es una labor nada fácil. De esta forma y sabiendo que el destino siguiente era Australia, decidimos pasar 4 días en Singapur para conocer por fin  esa extraña e irreconocible parte de Asia.

Del tráfico de opio  a la pulcritud y el orden

El desarrollo en Singapur ha sido exponencial, parece mentira que esta isla hace apenas 100 años era completamente diferente a lo que hoy podemos descubrir y disfrutar. Los traficantes se enriquecían con el tráfico de opio. La población vivía épocas donde la violencia, la prostitución y el consumo doméstico del opio estaba a la orden del día, los edificios se recuerdan mugrientos, conviviendo entre un sinfín de inconvenientes de los cuales, a día de hoy, parecen fantasmas del pasado.

SingaporeEs curiosa la capacidad del ser humano de pasar de un extremo al otro. Singapur se la conoce actualmente como la ciudad que nunca duerme, la Suiza asiática, la ciudad de los leones. Es una floreciente isla, antigua colonia inglesa, una ciudad estado, que se ha convertido en uno de los gigantes económicos de Asia siendo hoy uno de los países más prósperos del mundo. Desaparecidos los fumadores de opio, los prostíbulos, las casas desaliñadas, las embarcaciones recolectoras de perlas, el contrabando en esa época colonial, la ciudad de los leones resplandece y brilla con una pulcritud increíble de superar. Te asombra al mismo tiempo sus prohibiciones, sus multas del todo exageradas para la mentalidad occidental. Multa por tirar papeles, por orinar, por no tirar de la cadena en los aseos públicos, por bailar o hablar en público sin permiso, por mantener relaciones sexuales “contra natura”, por mascar chicle. De hecho no encuentras chicles en las tiendas, los retiraron al ver que los encontraban pegados por los asientos de los metros, pegados en las aceras…. El turista puede llevar un máximo encima, no os parece increíble. Multa por comer o beber en el metro…. en fin y un largo etc, complicado de explicar. No obstante el resultado obtenido es de una seguridad, limpieza extrema y organización paisajista que te llega a fascinar. ¿Qué ha sido de su pasado?

Diversidad cultural enriquecimiento familiar

La diversidad con que te encuentras es una curiosa mezcla de las culturas china, india y malaya, aunque también existe una parte de la población de origen árabe. Los cuatro idiomas oficiales de Singapur son el mandarín, el malayo, el tamil y el inglés.

Nuestra familia de acogida en SingaporeÁngel había contactado con una familia de procedencia china que llevaba años viviendo en Singapur. Nos invitaron a pasar esos días con ellos y de esta forma conocimos un poco más de cómo una familia se adapta  y se arraiga a una ciudad que le ofrece un sinfín de posibilidades. Pasamos tres días con ellos, no acababan de entender el porqué de nuestro viaje. Fueron curiosos esos días, pues nuestras familias eran bien diferentes y la convivencia se enriqueció en las conversaciones acerca de la educación de los niños y en qué opinaba cada familia en lo que cada uno de nosotros considerábamos que era una buena educación para los niños. De nuevo los aspectos culturales daban pie a opiniones contrastadas.

Noa estaba creando un sinfín de manualidades, llenaba una de las mesitas en las que jugaba, mientras Ishi y los dos niños de la casa jugaban a los playmobil y a perseguirse por la casa. Rongxin, la mama de la familia no dejaba de observar  a Noa, fascinada en su capacidad de crear cualquier cosa con un sinfín de cachivaches que encontraba interesantes para su nueva creación imaginaria.

–          Noa, mira este cochecito, ves que tiene números, vamos a jugar a sumar.- Rongxin movía los números del camión de madera donde aprendías a sumar de forma sencilla.

–          No, yo no sé todavía de eso, la mami me está enseñando.- Noa le dejo de prestar atención, era más interesante el elefante azul que dibujaba con acuarelas.

–          No te preocupa que no sepa sumar y restar?, por edad ya le tocaría.– Me pregunto la mama después.

–          Bueno quizás no sepa todavía sumar, restar y leer, pero se está desarrollando en una creatividad constante, adaptándose a un sinfín de otras realidades, valores y vivencias que estamos seguro que le hacen crecer como persona.- y tras ello se inició un debate muy interesante.

¿Quién está seguro, como padre, de que la educación que le está aportando a sus hijos es la mejor educación que se les podría dar?, hay tantas variantes. El sistema educativo con el que cuentan en Singapur está orientado desde la escuela primaria a desarrollar valores, carácter y aptitudes, motivando a los estudiantes en la investigación, la creatividad y el emprendimiento. Desde bien pequeños la exigencia es constante, aplicando sistemas nacionales de evaluación permanentes, tanto en los colegios públicos como en los privados. Los resultados que están obteniendo entre jóvenes de 10 a 14 años, en las pruebas mundiales de matemáticas y ciencias están siendo extraordinarios, calificándose siempre en los primeros lugares. La preparación para el ingreso en las universidades conlleva dos a tres años de estudios preuniversitarios. Y a pesar de que el fracaso escolar es casi nulo, solo logran ingresar en las universidades los más capaces debido a las exigencias meritocráticas.

Cartel sobre educación en SingaporeRecuerdo que durante esos días asistíamos diariamente a la biblioteca a realizar el “homeschooling”, estaban repletas de estudiantes y padres con niños pequeños estimulando a sus hijos en la lectura. Hacíamos cola desde primera hora de la mañana, pues si llegabas tarde ya no tenías sitio donde ubicarte. Yo creo que ha sido el país donde he visto las bibliotecas más abarrotadas y bien amortizadas.

Los espacios estaban de lo más estudiados, el ambiente te inducia al estudio y los materiales estaban muy bien cuidados en una gran amplitud y variedad. Los niños tras la escuela normalmente van a alguna actividad extraescolar, ligada al deporte, la música, los idiomas…. No obstante tras los debates y haciendo de diablillo, les preguntábamos a sus padres si tanta actividad extraescolar era necesaria, de ¿si los críos no se quejaban de que solo querían jugar un ratito más?, de si el nivel de exigencia no les creaba estrés, o si el sistema con tanta evaluación no creaba niveles de competitividad exagerada…. Y bueno, como no, también las preguntas que se generaban eran para el lado contrario de si ¿el viaje realmente les haría personas tolerantes o si de lo contrario se cerrarían en banda no queriendo ver más mundo en cuanto llegaran a España?, ¿No irán retrasados a su regreso al integrarse de nuevo a su escuela?, ¿serán capaces de adaptarse y estar atentos en clase tras tanta libertad?…. y la pregunta clave ¿Qué es lo que necesitan los niños, cual es la clave de su felicidad?…… y más y más preguntas, muchas veces con una respuesta en la que cada persona tendría su granito de arena que aportar, pues cada familia es un mundo, desarrollando su propio patrón de comportamiento y rutinas, el alma familiar, ese sentido de pertenencia, de lealtad, donde cada uno encuentra esa felicidad dentro del propio sistema. Y esa noche, en nuestras dudas sobre como aportarles felicidad, recordé unas frases de Osho. En nuestras imperfecciones sabemos que como padres muchas veces nos equivocamos, y no sabemos identificar qué es lo que sucede a nuestros hijos, que nos están mostrando. Pero, si que estábamos seguros, de que el viaje les estaba mostrando valores para crecer como personas y que todo lo vivido se hacía desde el amor  a la familia y por conocer más de este hermoso mundo y su gente al que hay que cuidar con pasión.
 
 

“La mitad de tu Ser consiste en tu madre y la mitad de tu Ser consiste en tu padre. Tú estás aquí por ellos. Todo lo que está ocurriendo es, en cierto modo por ellos”

Osho

Intercambio de recetas

Cada una de las familias seguía su vida durante el día, unos iban al trabajo, a la escuela u otras actividades extraescolares y nosotros nos dedicábamos a recorrer Singapur. Uno de los días celebramos el cumpleaños de Ángel apagando las velas en un pastelito de chocolate en una de las terrazas, sudamos lo nuestro para encontrar a alguien con un encendedor. Y de regreso al hogar la nueva familia ya estaba al completo, Y de nuevo la cocina creaba harmonía. Con la familia vivía una mujer filipina que realizaba las faenas de la casa y cuidaba de los niños cuando los padres se ausentaban en sus trabajos. Era silenciosa, prácticamente no te dabas cuenta de que estaba, y por supuesto cocinamos mano a mano, ella preparaba todo, debía sorprenderse en nuestra manera muy cercana, pues el trato con ella era muy cálido con los niños pero con sus padres mantenía una relación de invisibilidad que me sorprendía. Que gran cocinera. Nos mostraron un sinfín de platos chinos, debido a su procedencia, así que la gastronomía que solían recrear procedía de su país de origen. Estaban deliciosos, había unas setitas pequeñas con el tronco muy largo que nos fascinaron, bolitas de pescado, vegetales aliñados con salsas diversas, ummm! se nos hace la boca agua. Y nosotros preparamos una crema de calabacín, una ensalada, un sinfín de tortillitas de patatas en una sartén liliput… los platillos salían a la mesa y eran devorados en un santiamén. El olor de cada receta se envolvía en mil olores de los otros platos, y los cuatro niños reían entre ellos, y los adultos intercambiábamos miradas disfrutando de esa facilidad infantil de convertir cualquier cosa en risa.

–          Si queréis mañana podemos ir a patinar o en bicicleta bordeando el mar, es un lugar con encanto.- Nos propuso Rongxin.

–          Si, estaría muy bien, ya os he dicho que no nos queremos ir.- Sabíamos que esa seria nuestra última noche en su casa, el tiempo había pasado muy rápido.

Lo que quiero hacer en lo que queda de vuelta al mundo

Ishi jugando en un parqueEsta vuelta al mundo está siendo fenómena. No paramos de dar vueltas y más vueltas por el mundo. Me encantó dormir en medio del desierto en Rajastan y jugar con los elefantes, darles de comer, y montar sobre su lomo. A mí me gustaría ir a un parque en Australia donde poder dar de comer a los canguros y tocarlos y saltar con ellos. Nunca he visto canguros todavía. Sueño con bañarme con delfines, en Tailandia al final no pudimos. Aunque también me daría un poco de no sequé antes de meterme en el agua con el delfín.  Bueno los tiburones son los que más miedo me dan, a mi aita también le gustaría ver un tiburón blanco desde dentro de una jaula, eso dice que será en África, mami, Noa y yo no queremos que lo haga. En áfrica también veremos elefantes, pero más grandes que los asiáticos, gacelas, cocodrilos, rinocerontes de dos cuernos, leones, jirafas, guepardos, ñus y otros animales.  Me gustaría ir en autocaravana y dormir en ella, seria chulísimo, eso aita dice que lo haremos cuando lleguemos a Nueva Zelanda.

Y tirarme sobre barcas hechas de bambú por un rio. Ir a más casas con más niños de mi edad y de la de Noa, es muy divertido cuando hay muchos niños. Comer otro banquete de bichos gigantescos, como los de Tailandia. Ir otra vez a rodicios pizzeria como hicimos en Sao Polo con nuestros amigos Luiz y Luzia, y restaurantes de todas las partes del mundo. Repetir en otros parques naturales, a mi familia le gusta la naturaleza. También me gustaría encontrarme un mes con mis primos y tíos Dani, Guille, Vivi, Manuel…. A veces echo de menos a mi familia y a mis amigos de clase.

También estaría bien ir a algún parque de atracciones, y que aita acabe su colección de las pegatinas de cervezas que estamos recolectando por cada cerveza diferente de cada país, y Aita me explica más cosas de todos los países que estamos recorriendo.

Ishi

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5 respuestas a Singapur, una isla en Asia

  1. Ester dijo:

    Diana me ha encantado tu reflexión sobre la EDUCACIÓN, me imagino que a lo largo de este viaje os abran asaltado dudas…jo pero yo estaría muy tranquila pues creo que este viaje es el mejor regalo que habéis podido dar a vuestros hijos…y a nivel de educación lo que han podido aprender durante el viaje esta a años luz de lo que hubieran aprendido en la escuela…creo sinceramente que la experiencia que han vivido vuestros hijos es algo tremendo para su crecimiento y solo hay que ver la cara de felicidad y las redacciones tan guapas de Ishi…y Noa ya aprenderá a sumar y a leer…tiempo tendrá..pero sabes Diana? que le quiten lo bailao… habéis estado conviviendo, adaptandoos a las continuos cambios culturales, resolviendo conflictos…VIVIENDO, APRENDIENDO,SINTIENDO…para mi eso es EDUCACIÓN…FELICIDADES FAMILIA.

    • Mil gracias de nuevo Esther, la verdad es que estamos muy contentos con la experiencia, como siempre tengo la tendencia a ser muy optimista, por ello de vez en cuando me gusta que queden reflejadas dudas que se nos presentan, pues no es oro todo lo que reluce. Es decir que como padres tenemos nuestros altos y bajos, nuestros aciertos y nuestras equivocaciones… Sabemos que ha de ser a si, es un aprendizaje continuo y sorprendente. Disfrutando en este acompañamiento en su vida y como tu dices las sumas, restas y lecturas varias ya vendrán. Que les quiten lo bailao…. Jajaja.
      Un abrazo
      Ángel, Diana, Ishi & Noa

  2. Muy buenas, queremos invitaros a nuestro blog donde hemos reunido las canciones de las series más famosas de la televisión para los más pequeños; Alf, Casimiro, Barrio Sésamo, Los Fraguel, Miliki, Bob Esponja y muchos más!

    • Mil gracias, a través de vuestra página hemos podido enseñar y recordar junto con Ishi y Noa algunos de los momentos vividos en nuestra infancia ligados a esas canciones entrañables. Han podido conocer por fin a Casimiro del que tantos recuerdos tenemos. Justo antes de ir a dormir en aquellos dulces años.

      Un abrazo

      Ángel, Diana, Ishi & Noa

  3. Vis dijo:

    Como me gusta cuando salimos en el blog, Ishi el find k viene nos vemos en casa…
    Muaaaaaa,
    Vis

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